Desde hoy y como es costumbre para la celebración del Septenario de los domingos de San José que comienzan mañana, San José se viste un año más de hebreo.

En esta ocasión, por la coincidencia de los cultos en su mayor parte durante la celebración de la Cuaresma, se presenta con el terno de colores predominantemente morado, el color litúrgico de este tiempo.

El Patrón estrena además un nuevo talit y pañuelo de encajes, mientras que el Santísimo Niño estrena también para estos cultos un traje de espolín antiguo con trama en seda de tonos burdeos y bordados con motivos vegetales y florales.

Como detalle, a los pies del Patrón se encuentra de forma simbólica la ofrenda de dos tórtolas que la Sagrada Familia ofreció en el templo con motivo de la Presentación del Señor, la fiesta que conmemoramos cada año en el primer domingo de San José.

Nuestra enhorabuena una vez más a nuestro hermano y vestidor José Manuel Aragón Cortejosa por su impecable labor en la vestimenta del Patrón y su Santísimo Niño.