Una de las claves para entender la originalidad que se pretende con el paso del Patrón es la iconografía única que poseerá. El Bendito Patriarca Señor San José es uno de los santos mas venerados de toda la historia del Cristianismo, hasta el punto de que el Papa León XIII lo nombró Patrono de la Iglesia Universal en su exhortación apostólica "Oratio ad Sanctorum Iosephum" en virtud del vínculo sagrado que lo une a la Virgen María. San José es venerado, además de cómo Patrón de nuestro pueblo, como patrono de los padres de familia, las mujeres en estado de buena esperanza, los niños no nacidos, las familias, los trabajadores, los obreros, los artesanos, los carpinteros, los ingenieros, los viajeros, los moribundos, los emigrantes… En definitiva, todo un conjunto de exhortaciones, parabienes, patronatos y protectorados que hacen del Patriarca Josefino el principal de todos los santos y por tanto con una rica simbología e iconografía que se intentará desplegar en el paso, centrándose fundamentalmente en su patriarcado sobre la Iglesia Católica y su Patronazgo sobre San Fernando.

Aunque la iconografía que llevará el paso no está decidida, la comisión recomendó seguir un esquema ascendente desde los faldones y respiraderos hasta la peana donde se posará la imagen de San José. En este sentido, nos centraremos principalmente en los motivos que la Hermandad incluirá en las partes talladas del paso, dejando para posteriores revisiones, en función de lo avanzado del proyecto, la iconografía de los bordados.

En las diferentes cartelas del canasto y en forma de relieves escultóricos se desarrollará la iconografía mas conocida del Santo, los llamados popularmente “Siete Dolores y Gozos de San José”, que podríamos definir como “estados de ánimos” que se producían en el alma del Patriarca en función de los difíciles acontecimientos que en Su vida y en la de Su Bendita Esposa estaban ocurriendo. Basados en los evangelios de Mateos y Lucas, los siete dolores y gozos narran los momentos de angustia, tensión y nervios que en el seno de la Sagrada Familia se producían y que en muchas ocasiones los cónyuges no sabían interpretar, pero que aceptaban con humildad y resignación, sabiéndose elegidos y protegidos por el Altísimo, lo que les producía la complacencia del deber cumplido y recompensado. Son, por tanto, acontecimientos reales y dignos de figurar con preferencia en el paso de San José.

 Los distintos dolores y gozos del Bendito Patriarca son los siguientes: